La historia es la siguiente:
Joe Pressil empezó a salir con Anetria en 2005. Se hicieron novios, pero dos años después cortaron. Tres meses después de la separación ella le anunció que estaba embarazada de su hijo. PRessil estaba verdaderamente confundido, ya que siempre usaron preservativos, así que acordaron en que él se hiciera la prueba de paternidad de la cual resultó que en efecto, él era el padre. Así que Pressil llegó a un acuerdo con Anetria: se podían quedar en su casa y él pagaría todos los gastos.
Así estuvieron hasta febrero de este año, cuando Pressil, ahora de 36 años, encontró un recibo de un banco de esperma en Houston llamado Omni-Med Laboratories. El recibo tenía la descripción de "cryopreservación de muestra de semen". El nombre de él estaba en el recibo como si fuera el paciente. El ya aterrorizado hombre llamó a Omni-Med y en esta clínica lo transfirieron a su división de fertilidad avanzada. Ahí le dijeron que su "esposa" había ido con una muestra de su esperma y había hecho una fertilización in vitro. Terminaron diciendo que su esposa había quedado embarazada de esta manera.
Así que la gran pregunta fue: ¿Cómo había obtenido Anetria una prueba de su semen sin que Pressil lo supiera? Él llegó a la conclusión que ella la había obtenido de un condón usado que ella había guardado. Anetria niega tal acusación.
"No puedo creer lo que pasó, estoy devastado. Sobre todo no puedo creer que la clínica de fertilidad haya actuado sin mi consentimiento e incluso sin mi presencia" declaró Pressil.
Después de lo sucedido Pressil ha sido acusado de maltrato contra Anetria, ya que se reportó un caso de violencia intrafamiliar en el que él la quiso ahorcar, sin lograrlo.
Él ahora está demandando a la clínica de fertilidad avanzada.
Por cierto, del embarazo in vitro salieron dos gemelos varones.
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